Mi cajita de crayolas.

Ayer, cuando fui a la papeleria, decidi que me compraria una cajita de colores. Ya sabes, me encanta el poder crear cosas con las crayolas. Me agradan sus colores.
Hoy, al ver que tenia un rato desocupada, saque mis crayolas.
Primero, saque una crayola azul. Era linda, siempre me ha llamado la atencion el color azul, el color del cielo. Empeze a hacer trazos, unos grandes, y otros peque;os.  Habia diferentes tonos, con los cuales pude dar diferentes tonaidades a mi fondo. Nubes, cielo, pajaros en el aire. Silencio.
Para darle un poco de brillo, saque mi crayola amarilla, la que tiene el color del sol. El amarillo me recuerda a un amigo mio, el cual es muy alegre y tiene una mentalidad que me encanta. Y pues claro, me recuerda a el porque es su color favorito. Dibuje un enorme sol, alumbrando mi cielo con todo su ser.
Despues, vino la crayola verde. Donde chingados iba a poner el color verde? Digo a ver, tengo un sol, tengo un cielo, que demonios, vamos a poner arboles en el fondo. Siempre me he sentido comoda entre la naturaleza, perdida en la sombra de las hojas, en la grandeza de los arboles, en lo profundo del bosque. No se, simplemente siempre me ha llamado la atencion eso.
En fin, observo mi dibujo un momento. Muy lindo, muy lindo, pero aun le faltan muchas cosas.
Vamos cambiando un poco la perspectiva de este dibujo. Agarre el color cafe, y el color negro, y empeze a hacer trazos, asi como de edificios. Estos parecen casi fantasmas, mas se ven algo curiosos. Estos son tan altos como los de Nueva York, y tienen miles de ventanas, tantas que las podrias confundir con un espejo enorme. Con el negro, empiezo a trazar las orillas de las calles, y con el gris empiezo a pintar las ventanas, pintar las puertas de mis edificios y trazo los barandales de sus escaleras.
Mientras yo estaba concentrada dibujando, llega mi padre despues de un largo dia de trabajo. Como de costumbre, metio a nuestro perrito, Terry, y este se subio hasta mi cuarto, y tiro todas mis crayolas! Increible, que estresante! Tuve que recojerlas todas, ya que quedaron todas esparamadas en mi cuarto.
Oh sorpresa! Donde rayos esta el rosa? Ese malgastante, rutinario de niña, infantil, y estresante, rosa. Perdon, pero definitivamente llego un momento en el que ya no tengo blusas rosas, solo si acaso una o dos, que uso para dormir. En fin, queria un poco mas de color, asi que añadi unas flores a donde se encontraba el bosque, para que le diera un poco mas de luz.
Vaya vaya, el dibujo va tomando forma, mas creo que falta algo. Agarre mi crayola color piel, y empeze a dibujar a una chava. Alta, con brazos largos y piernas largas. Le dibuje una melena larga, que le llegaba hasta la cintura, y tambien le pinte mechones azules, los cuales le dieron un estilo mas tetrico, no tan de niña.
Agarre el azul claro, y el blanco y pinte sus ojos. Unos ojos dulces, maliciosos, y solos. Se veia la tristeza en sus ojos, la soledad la consumia. Digo, no es que yo me sienta asi a veces, no? Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia.
Acabe a mi personaje, quedo linda linda, pero igual, algo le sigue faltando a mi dibujo. Claro, una pareja. Porque no?
Tome la crayola, he hize algo similar a mi primera personaje. Este, era un poco mas alto que ella, sus brazos, tambien eran largos. Sus manos, rozaban junto a las de ella. Le puse ropa, una camiseta de cuadros roja con negro, y unos pantalones negros. Algo tetrico, si puede, pero en fin, es un dibujo solamente, no?
Alegria, alegria, mi dibujo ya casi esta terminado. Ha, me falta una crayola. El rojo.
El rojo del amor, el rojo de la ternura, porque no? Pondre un corazon rojo alado de la pareja, y asi mi dibujo finalmente estara terminado.
Al momento en el que roze la pagina, ah sorpresa. Se rompio mi crayola roja.
Alguien me puede explicar, porque justamente cuando algo llega a su limite, cuando algo llega un momento en el que dices "no podria ser mas feliz" se rompe?
Alguien me puede explicar, porque demonios se rompio mi crayola roja?
Por alguna razon, se me salio una lagrima, y cayo sobre mi dibujo, justamente en donde iba a poner el corazon final, el corazon el cual terminaria todo.